19 agosto 2008

Mercenario

La Historia está hecha de fechas, batallas y reyes. En el mundo hay demasiadas personas a las que se les llena la boca hablando de honor y de sacrificarse por el bien común y que, a la hora de la verdad, mandan a sus camaradas a la muerte mientras se quedan fuera del alcance de las flechas. El camino de un hombre, como su espada, puede torcerse tras el combate. La gente quiere luchar por decidir su destino con libertad pero no es suficiente con saber coger un arma, hay que tener el valor para atravesar a tu enemigo mientras le miras a los ojos. Yo puedo hacerlo, yo lucharé por vosotros. El orgullo está bien, pero el oro es el oro.