30 diciembre 2008

Naturaleza urbana

Donde pensaba que ya era imposible que pudiera crecer algo, la vida se apareció ante mi de forma repentina y extraordinaria. Que suerte poder comprobar que aun quedan, entre tanto cemento, espacios para la supervivencia. Y, a pesar de no sentirme a veces la persona más indicada, me gustaría poder proteger algo tan frágil y valioso.