03 agosto 2007

Expectativas

No es por lo que pasó, ni por cómo pasó. El problema es la frustración que siento cuando las cosas no son como imagino que deberían ser, en vez de disfrutarlas como realmente son. Tal vez espero demasiado, sin tener en cuenta los sentimientos de los demás ni mis propias limitaciones.

Ahora se presenta otra oportunidad. Esta vez no voy predecir o provocar acontecimientos. Renuncio a intentar ser arquitecto de mi destino para ser un mero espectador de lo que ocurra, aceptando lo que tenga que pasar, dejándome llevar sin lamentarme. Adaptándome.